Juan Martín Del Potro se quedó a las puertas de su primer torneo Masters, tras perder en la final del ATP de Montreal por 7-6 (4), 6-7 (3) y 1-6 ante un Andy Murray sólido, que en ningún momento se dejó llevar por las molestias físicas del argentino, factor clave de esta frustración que le quitó al tandilense un torneo que tenía en sus manos, y que se le fue como agua entre los dedos.
El partido tuvo un comienzo de ensueño para Delpo. Tras un set en el que ninguno pudo quebrarse, ambos tenistas llegaron igualados en seis. Y Del Potro hizo la diferencia en el noveno punto del tie break, cuando se quedó con el saque del europeo para quedar 5-4 arriba. Luego, con su servicio sentenció el desempate por 7-4, quedándose así con el primer juego.
Con la ventaja en el marcador para el argentino, nuevamente los dos jugadores tuvieron que definir en un tie-break. Sin embargo, molestias que Del Potro comenzó a mostrar claramente a partir de los games finales de este segundo parcial, hicieron que el desempate se convirtiese para él en un set decisivo, ya que de perderlo daba la impresión de que no tenía resto para seguir.
Los errores claves en algunos puntos más los méritos de Murray, que siempre estuvo concentrado en el juego, permitieron al escocés quedarse con el tie break por 7-3.
El tercero Delpo lo jugó por el hecho de que era una final, porque de lo contrario hubiese abandonado. El juego se dio como todo el mundo lo pensaba, con un Murray como absoluto dominador, quien en un abrir y cerrar de ojos se llevó el parcial por 6-1, y de esta manera cerró una semana inolvidable con la obtención del 13º título de su carrera, y su segundo Masters (el primero fue este año en Miami), que se suman al estreno a partir de mañana como el nuevo número 2 del mundo.
Para Del Potro queda el consuelo de dos semanas espectaculares, con título en Washington y esta final, y el hecho de haber dejado en el camino a dos top ten como Rafael Nadal y Andy Roddick, que le permitirán ser nuevamente número 5 del ranking a partir de mañana.
El partido tuvo un comienzo de ensueño para Delpo. Tras un set en el que ninguno pudo quebrarse, ambos tenistas llegaron igualados en seis. Y Del Potro hizo la diferencia en el noveno punto del tie break, cuando se quedó con el saque del europeo para quedar 5-4 arriba. Luego, con su servicio sentenció el desempate por 7-4, quedándose así con el primer juego.
Con la ventaja en el marcador para el argentino, nuevamente los dos jugadores tuvieron que definir en un tie-break. Sin embargo, molestias que Del Potro comenzó a mostrar claramente a partir de los games finales de este segundo parcial, hicieron que el desempate se convirtiese para él en un set decisivo, ya que de perderlo daba la impresión de que no tenía resto para seguir.
Los errores claves en algunos puntos más los méritos de Murray, que siempre estuvo concentrado en el juego, permitieron al escocés quedarse con el tie break por 7-3.
El tercero Delpo lo jugó por el hecho de que era una final, porque de lo contrario hubiese abandonado. El juego se dio como todo el mundo lo pensaba, con un Murray como absoluto dominador, quien en un abrir y cerrar de ojos se llevó el parcial por 6-1, y de esta manera cerró una semana inolvidable con la obtención del 13º título de su carrera, y su segundo Masters (el primero fue este año en Miami), que se suman al estreno a partir de mañana como el nuevo número 2 del mundo.
Para Del Potro queda el consuelo de dos semanas espectaculares, con título en Washington y esta final, y el hecho de haber dejado en el camino a dos top ten como Rafael Nadal y Andy Roddick, que le permitirán ser nuevamente número 5 del ranking a partir de mañana.
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