La poderosa derecha de Fernando Verdasco consagró a España, por segundo año consecutivo, campeón de la Copa Davis y desató la euforia del público presente en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Con la victoria de la dupla formada por el madrileño y Feliciano López sobre Radek Stepanek y Tomas Berdych por 7-6 (7), 7-5 y 6-2, el equipo ibérico se impuso en la serie final sobre los checos por 3-0 y se adjudicó la Ensaladera de Plata por cuarta vez en su historia.
El primer set del partido fue muy parejo y se definió en el tie break, en el que la pareja española levantó un set point en contra y terminó imponiéndose por 9-7. En el segundo parcial, Stepanek comenzó a mostrar signos de cansancio y Berdych, algunos problemas con su saque. Sin embargo, con más trabajo que al principio, los checos lograron mantener sus servicios hasta el 11º game, cuando los locales consiguieron el break, se pusieron 6-5 y, en el juego siguiente, López marcó el 7-5 con un ace.
Con el segundo parcial para la Armada, la consagración estaba cada vez más cerca y la gente comenzó a festejar en las tribunas. Ya en medio de un clima de alegría, el tercer set se hizo más fácil para los españoles, que arrancaron con un quiebre en el primer juego y después estiraron la ventaja con otro en el quinto, para poner el 5-1. Luego de que los visitantes se llevaran el séptimo game, Feliciano sacó para partido. Con el 40-30 a su favor, el de Toledo no pudo cerrar con un ace pero luego de su segundo saque, una derecha de Verdasco sobre el cuerpo de Stepanek le dio a España el punto que necesitaba para quedarse, una vez más, con la codiciada Ensaladera.
Así, López y Verdasco volvieron a ser los grandes protagonistas de la Davis, tal como lo habían hecho el año pasado cuando derrotaron a Argentina en Mar del Plata. Y el equipo ibérico demostró una vez más que es uno de los más poderosos de la última década en el tenis internacional. De las últimas diez finales del torneo, disputó cinco y se quedó con el trofeo en cuatro ocasiones: en 2000, venció a Australia 3-1 en el mismo escenario de hoy; en 2004, derrotó a Estados Unidos por 3-2 en Sevilla; y en 2008, fue 3-1 frente a la Legión. Además, con la consagración de esta tarde se transformó en el primer país en retener el título, desde que lo hiciera Suecia en 1998. No hay dudas, el poder de la roja está dominando también el deporte blanco.
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