El WTA de Estoril (Portugal) ha llegado a su fin y la campeona es una española: Anabel Medina-Garrigues, quien aplastó en la final a la alemana Kristina Barrois por 6-1 y 6-2, en una hora y 15 minutos de partido. De esta manera, el certamen lusitano fue para la ibérica, que consiguió su décimo trofeo en el circuito femenino.
Ambas llegaron al último partido con la confianza por las nubes, producto de los buenos resultados que habían conseguido para llegar a la final. Barrois había eliminado a la máxima favorita: Klara Zakopalova [1], en cuartos de final, y a Elena Vesnina [6], en octavos. Sin embargo, esto no le alcanzó para doblegar a Medina Garrigues, quien estuvo intratable desde el comienzo del certamen, en el que se coronó de manera invicta, ya que no cedió ningún set.
Previamente, Medina Garrigues dejó en el camino a la rumana Simona Halep, la húngara Greta Arm [8], la checa Klara Zakopalova [3] y la rumana Mónica Nicolescu. Así, la número 61 del ranking afrontó esta final con la misma intensidad que venía exhibiendo, y sin mayores problemas se impuso a Barrois, en un partido que no tuvo equivalencias.
La española le generó doce ocasiones de break a su rival (siete en el primero y cinco en el segundo), de las cuales quebró en seis de ellas. Sin embargo, la clave estuvo en el segundo saque de ambas, debido a que Barrois no pasó del 15% de puntos ganados durante todo el encuentro; por eso, esta debilidad le permitió a la ibérica manejar el juego sin problemas, manteniendo el primer servicio por encima del 65%.
Medina Garrigues se llevó 37.000 dolares y 280 puntos para el ranking. Además cortó una racha de casi dos años sin títulos, debido a que su último trofeo fue en abril de 2009 en Fes (Marruecos). Anteriormente, la española se había consagrado en Palermo (cuatro veces), Estraburgo (tres oportunidades) y Camberra (una ocasión).
Cuadro de singles femenino de Estoril
Foto: Yahoosports.com
Ambas llegaron al último partido con la confianza por las nubes, producto de los buenos resultados que habían conseguido para llegar a la final. Barrois había eliminado a la máxima favorita: Klara Zakopalova [1], en cuartos de final, y a Elena Vesnina [6], en octavos. Sin embargo, esto no le alcanzó para doblegar a Medina Garrigues, quien estuvo intratable desde el comienzo del certamen, en el que se coronó de manera invicta, ya que no cedió ningún set.
Previamente, Medina Garrigues dejó en el camino a la rumana Simona Halep, la húngara Greta Arm [8], la checa Klara Zakopalova [3] y la rumana Mónica Nicolescu. Así, la número 61 del ranking afrontó esta final con la misma intensidad que venía exhibiendo, y sin mayores problemas se impuso a Barrois, en un partido que no tuvo equivalencias.
La española le generó doce ocasiones de break a su rival (siete en el primero y cinco en el segundo), de las cuales quebró en seis de ellas. Sin embargo, la clave estuvo en el segundo saque de ambas, debido a que Barrois no pasó del 15% de puntos ganados durante todo el encuentro; por eso, esta debilidad le permitió a la ibérica manejar el juego sin problemas, manteniendo el primer servicio por encima del 65%.
Medina Garrigues se llevó 37.000 dolares y 280 puntos para el ranking. Además cortó una racha de casi dos años sin títulos, debido a que su último trofeo fue en abril de 2009 en Fes (Marruecos). Anteriormente, la española se había consagrado en Palermo (cuatro veces), Estraburgo (tres oportunidades) y Camberra (una ocasión).
Cuadro de singles femenino de Estoril
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