Roger Federer [1] plantó bandera, y volvió a recuperar el título que se la había escapado en 2009. El suizo, campeón entre 2006 y 2008, se convirtió nuevamente en el ganador del ATP 500 de Basilea (ciudad en la que nació), tras vencer a su verdugo en la edición pasada; Novak Djokovic [2], por 6-4, 3-6 y 6-1, al cabo de una hora y 55 minutos.
En el primero, los dos se plantaron en la cancha con la idea de hacer valer su primer servicio en la superficie de cemento. En ese rubro, el suizo sumó un 80% de tantos ganados con el saque; mientras que el serbio alcanzó un 65%.
Durante el desarrollo de la manga, ambos tuvieron chances para quebrarse, para así obtener una diferencia. Allí, los dos contaron con tres oportunidades por lado, pero el único que se benefició fue Federer, quien logró romper el saque de su rival en una ocasión, lo cual le bastó para adueñarse de la manga por 6-4.
A pesar de la ventaja inicial, lo cierto es el décimo game de este primer parcial se lo pudo haber adjudicado cualquiera, puesto que Nole salvó un set point, y dispuso de un break para igualar en cinco. Pero la posibilidad no la aprovechó, y el suizo, en la segunda pelota que tuvo, no la desperdició y se llevó la manga.
El segundo arrancó con un aluvión descomunal del balcánico, quien lejos de sentir la pérdida del set inicial, se despachó con tres juegos en unos minutos, por lo que se adelantó de gran manera en el parcial. En tanto, el suizo hizo lo que pudo, pero no le sirvió de mucho, ya que la diferencia estaba hecha, y era muy difícil de revertir; por ende, Djokovic se manejó con soltura a lo largo del set, y sin problemas se llevó el mismo por 6-3.
En el último, un error iba a ser suficiente para la derrota. En este punto, el balcánico fue el que cedió primero, luego de cometer una doble falta en el cuarto juego que lo dejó 1-3 en el marcador. Por su parte, Federer rápidamente puso manos a la obra para no dejar recuperarse a su rival, y estableció el 4-1 a su favor.
Más tarde, después de idas y vueltas, el serbio terminó por sucumbir en el match, y volvió a entregar su servicio al suizo, que con el 5-1 a su favor, no tuvo más que cerrar el encuentro por un claro 6-1, que le permitió, entre otras cosas, recuperar el título en su ciudad natal.
Así, el helvético sumó su trofeo número 65, y de esta manera se consolidó en el cuarto puesto de los jugadores con más títulos en la Era Abierta. Antes, la ubicación la compartía con el estadounidense Pete Sampras.
Además, la victoria sirve para ampliar un poco más la diferencia con su rival de hoy, en la pelea por el segundo y tercer puesto del ranking mundial.
Cuadro de singles de Basilea
Foto: Yahoo deportes.com
domingo, 7 de noviembre de 2010
ATP 500 de Basilea: En casa, manda nuevamente Roger Federer
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